lunes, 24 de noviembre de 2014

Ejercicios

EJERCICIO 26

Cuando salga hoy a la calle, tiene que hacer el siguiente ejercicio: párese delante del escaparate de una tienda y observe algunos de sus productos, alrededor de 5 o 6 productos, fijándose en su color, en su precio, su utilidad y otros aspectos que pudieran interesar. En casa recuérdelos y apuntelos en una hoja.


EJERCICIO 27

Escriba desde el 82 al 202, contando de cinco en cinco.

EJERCICIO 28

ATENCIÓN

En este cuadro están los números del 1 al 70, pero faltan cinco de ellos. Debes anotar los números que faltan en los recuadros de abajo. (Ejercicio del manual de "Ejercicios físicos y actividades de agilidad mental para personas mayores.")




15
61
60
66
9
69
4
62
7
67
59
68
19
4
62
7
67
59
68
19
33
42
23
40
14
29
49
58
63
11
32
64
38
51
25
47
57
52
1
44
16
30
2
65
35
27
56
54
8
24
17
43
55
5
22
26
48
45
50
39
46
36
53
18
21
37
28
34
13
70
10
6








EJERCICIO 29

Para finalizar los ejercicios de hoy nos aprendemos un trabalenguas. !ÁNIMO¡

"En la ciudad de Pamplona hay una plaza,
En la plaza hay una esquina
En la esquina hay una casa
En la casa  hay una pieza
En la pieza hay una cama
En la cama hay una estera
En la estera hay una vara,
La vara en la estera
La estera en la cama
La cama en la pieza
La pieza en la casa
La casa en la esquina
La esquina en la plaza
La plaza en la ciudad de Pamplona."







Consejos para nutrir el cuerpo y el cerebro

 

¿Existe alguna dieta que sea “saludable para el cerebro”?

Sí y no. Si bien no existe una dieta específica que sea mejor para la salud del cerebro, llevar una dieta saludable es importante para la salud en general. Elegir alimentos que nutren el cuerpo y el cerebro puede ayudar a prevenir o demorar la aparición de enfermedades, incluso aquellas que causan demencia.

Consejos para nutrir el cuerpo y el cerebro


  • Controle su peso. Algunos estudios muestran que la obesidad, la diabetes, la presión arterial (sanguínea) alta y el colesterol alto pueden aumentar el riesgo de padecer demencia. Para bajar de peso y mantenerlo bajo, intente evitar las dietas a corto plazo o las dietas “de moda”. En cambio, adopte una manera saludable de pensar y de comer alimentos. Encuentre y respete unas pocas “reglas” que funcionen para usted. La dieta Mediterránea puede ser un buen punto de partida.
  • Coma frutas, vegetales y granos integrales. Ya lo ha escuchado antes: una dieta rica en frutas, vegetales y granos integrales puede reducir el riesgo de padecer enfermedades crónicas, incluidas las enfermedades del corazón, la diabetes y el cáncer. Probablemente no es ninguna sorpresa que esos mismos alimentos también ayuden a proteger la función cerebral. Los antioxidantes en los vegetales de hojas verdes, los crucíferos (tales como el brócoli, el repollo y los nabos), y los vegetales de cáscara oscura pueden ser particularmente protectores. Pruebe las remolachas, el brócoli, los repollitos de Bruselas, la coliflor, la berenjena, la col rizada, los pimientos rojos, la lechuga romana o la espinaca.
  • Evite las grasas saturadas. Los alimentos con alto contenido de grasas saturadas y colesterol, tales como las carnes rojas y los productos lácteos de leche entera, pueden contribuir a la presencia de niveles altos de colesterol. Con el tiempo, el colesterol alto puede aumentar el riesgo de padecer un ataque al corazón o un derrame cerebral. Para limitar su ingesta de grasas saturadas, use aceite de oliva o de canola (colza) en vez de mantequilla al saltear o freír alimentos, o bien use el horno o la parrilla para cocinarlos. Cuando coma carne, elija pollo o pescado. Además, elija productos lácteos sin grasa o con poca grasa en vez de productos de leche entera.
  • Obtenga sus ácidos grasos omega-3. Las fuentes más comunes de ácidos grasos omega-3 son los pescados grasos, como las sardinas, el atún, el salmón, la caballa y el arenque. Para obtener sus ácidos grasos omega-3, intente comer al menos uno de estos pescados una o dos veces por semana.
  • Hable con su médico acerca de tomar suplementos. Las investigaciones muestran que algunas vitaminas, tales como la vitamina D, la vitamina E, la vitamina B12 y el ácido fólico, pueden ayudar a proteger el cerebro. Además de una dieta saludable, tomar un complejo multivitamínico puede ayudar a garantizar que usted reciba una cantidad suficiente de estos nutrientes. Si usted no come pescado y está preocupado porque no ingiere suficiente cantidad de ácidos grasos omega-3, puede considerar tomar un suplemento de aceite de pescado.

Fuente es.familydoctor.org