Vamos a tratar hoy de un olvido cotidiano muy común que es el olvido de los nombres.
En ocasiones nos ocurre que estamos hablando con alguien a quien conocemos y no nos viene su nombre que de sobra conocemos, a la cabeza. o ejemplos como: me he encontrado con..., ayer jugué a las cartas con....
Esto puede que nos esté sucediendo más a menudo de lo que nos gustaría.
Para solucionarlo:
ATENCIÓN: preste realmente atención al nombre que le dicen, si está pensando en otras cosas o está distraído le será más difícil o imposible recordar el nombre.
REPETICIÓN: a lo largo de la conversación repita varias veces el nombre: "y entonces, Paco, ¿te vienes con nosotros?", "Paco a que hora quedamos?".
ASOCIACIÓN: intente asociar algún rasgo característico de la persona con su nombre. Intente hacer alguna relación, o intente asociarlo con el de otra persona conocida: amigos, familiares..., e incluso es útil asociarlo con otra palabra por la semejanza del sonido: López y lápiz.
Asociación pues, no es más que unir o relacionar en nuestro cerebro una información ya guardada y accesible con información nueva.
VISUALIZACIÓN: escriba mentalmente el nombre. Verlo escrito puede ser de mucha utilidad
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Muchas gracias por participar en esta página.